viernes, 11 de septiembre de 2009

Guns and Roses--November Rain


Descansa en Paz mi amor, rezaba la lápida del difunto. Apenas podía mantenerse en pie la apenada esposa, si no fuera por la ayuda de un sinfín de brazos que evitaban su desplome. Un arcángel gigantesco con cuerpo marfil, desplegaba sus alas inertes mientras parecía sonreír al infinito. El sacerdote a pie de tumba, terminaba su sermón y dibujaba con tierra la señal de la cruz sobre el ataúd. Los asistentes al funeral no podían creer cómo la vida podía terminar tan de repente. Por qué tuvo que probar el beso frío de la dama negra mientras traicioneramente te segaba la vida de un plumazo. Es lo que tiene el destino, que cuando menos te lo esperas se convierte en el sicario de la muerte. Perplejos, tristes, mudos en el dolor arropaban los allegados a la joven viuda. Ella repasaba su vida con él como en negativos de fotografía: su primer beso, una puesta de sol, escenas de sofá, los abrazos, más besos, sus ausencias a media noche, las sospechas, llamadas bajo número oculto en su móvil. Todo eso ya no importaba, porque a partir de ahora sólo queda el vacío. El forense, un apuesto doctor, amigo de la familia, firmaba en su informe que la muerte fue a consecuencia de un infarto. Ella agradeció su presencia en el entierro y se sintió reconfortada al sentir su mano sobre su hombro mientras el aroma de su perfume a caramelo la distraía del olor a resina de ciprés.
Tras la ceremonia, ella volvió a casa. Delante del espejo se fue despojando de su ropa. Su melena rubia y ondulada resaltaba unos ojos azules de mirada hechicera. Se vio guapa. Disfrutó de la imagen que le devolvía el espejo. Una gota de sudor le caía por el cuello marcando un sendero líquido que terminaba entre sus pechos. Respiró y pudo comprobar que el olor a arsénico parecía inapreciable en el ambiente. Limpió la marca de los labios de su difunto marido que dejaban huella en el vaso del baño, desde donde morían los últimos aromas al veneno. Algo se movió en su habitación, mientras oía una voz con olor a caramelo que le decía “ Te espero en la cama preciosa “

1 comentario:

  1. Vaya con la "viuda negra" y el "doctor caramelo"... cuánta maldad concentrada!!! Te veo imparable!!! Bien, me gusta este punto de literatura negra.

    !Ay! Qué me gusta esta canción!!! Cómo me flipaba este video en su momento, sobre todo la escena del solo de Slash. Acabo de leer en wikipedia sobre el video... te dejo el enlace, aunque supongo que ya lo habrás visto. Muy curiosa la historia de la trilogía de los videos.: http://es.wikipedia.org/wiki/November_Rain

    Bss

    ResponderEliminar